PA1- Mi entorno

Mi habitación es de los pocos lugares en el que me siento a gusto y a salvo del mundo exterior. Está orientada hacia el noroeste haciendo que la habitación reciba luz durante gran parte del día. Se accede por un pasillo que también conecta con las habitaciones de mis compañeros de miso, siendo mi puerta la del fondo.

Nada más entrar se aprecian las vistas desde la ventana a la ciudad de Valencia, inclusive la ciudad de las artes y las ciencias, justo debajo de ella está mi cama. A la derecha encontramos un armario empotrado y al otro lado se encuentra mi mesa de escritorio con su respectiva silla. Mi habitación es muy sencilla con tonos neutros que hacen más espaciosa la habitación, creando de tal manera un lugar perfecto para concentrarse.

¿Por qué has elegido este lugar?

Es el lugar donde paso la mayoría del tiempo ya que hace poco que me he mudado y no conozco mucho la ciudad.

¿Qué te hace sentir a gusto?

Me hace sentir a gusto las vistas despejadas hacia el exterior y sentir que estoy en un  espacio reservado para mi.

¿Existe algún elemento disruptor?

El ruido de  la bulliciosa ciudad que hay los jueves por la noche.

¿Crees que te sentirías igual en otro espacio ahora mismo?

Sí, añoro la casa en la que he vivido hasta el día de hoy pero me vine aquí a comenzar una nueva etapa y seguir con mis estudios.

¿Piensas que las condiciones de espacio influyen sobre sus ocupantes?¿cómo?

Por supuesto, todo el espacio que nos rodea crea una sensación y emoción sobre las personas.

¿Cambiarías alguna cosa?

Cambiaría las paredes de gotelé ya que hoy en día es anticuado.

 

ATMÓSFERAS

 

Hay que entender el concepto de atmósfera cómo una energía o primera impresión con la que percibimos lo que nos rodea (personas, lugares, edificios, …) que nos produce unas sensaciones y emociones determinadas.

Así pasa con la arquitectura, no podemos escapar de ella. Cómo esté construido un edificio y su apariencia nos transmitirá una determinada energía acompañada de determinadas emociones.

Cómo arquitectos somos capaces de construir atmósferas dónde se ejecuta la vida cotidiana, se producen interacciones entre los seres vivos.

La creación de una atmósfera consta de nueve fases.

  1. El cuerpo de la arquitectura

En este apartado hay que entender las cosas materiales de una obra arquitectónica como si de las partes de un cuerpo humano se tratara, entenderlo como anatomía y entender la obra como ‘El Cuerpo’ que no como la idea de cuerpo.

  1. La consonancia de los materiales

La elección de los materiales se tiene que llevar a cabo con conciencia para lograr crear un espacio armónico en el que los materiales elegidos se complementen entre si y no choquen. De forma que se crea una energía por los materiales seleccionados.

  1. El sonido del espacio

Es cierto que el ruido que nos rodea influye en nuestro estado de ánimo y humor, el ruido de la ciudad, del campo, del pueblo, … Los ruidos de estos lugares nos transmiten sensaciones distintas. Manteniéndonos ajenos a los ruidos del exterior se podría decir que los edificios en si también crean ruido que influye en la energía que nos transmite el lugar

  1. La temperatura del espacio

Se trata nada más y nada menos de tener en cuenta las condiciones climáticas del lugar dónde vamos a edificar para así utilizar los materiales adecuados para ‘temperar’ un espacio. Es decir; si es un lugar caluroso, utilizar materiales fríos para regular la temperatura y crear un espacio agradable y confortable.

  1. Las cosas a mi alrededor

La decoración y distribución de un espacio, todo lo que nos rodee en un lugar influirán en nuestra forma de percibir ese lugar. Nos podrá transmitir seguridad, inseguridad, miedo, confort…

  1. Entre el sosiego y la seducción

Lo ideal es crear un espacio con una distribución natural, intuitiva, que no sea liosa y que vaya acorde con el uso del espacio.

 

  1. La tensión entre interior y exterior

A mi parecer existe una correlación entre el espacio público y el privado (interior, exterior), en el que la vida del exterior influye en la vida privada y viceversa. Es decir, el lugar dónde esté situada la obra influirá sobre el ciudadano que esté habitando o haciendo uso de ese espacio tanto cómo el aspecto del edificio y la utilidad de este influirán sobre las personas que transiten cerca de éste. Tanto en el espacio público cómo en el privado, un edificio transmitirá una cierta energía como a su vez el espacio dónde se encuentre éste.

  1. Grados de intimidad

Se trata del tamaño, la escala, la proporción y el tamaño de las cosas. La dimensión y masa de un objeto afecta a cómo percibimos nosotros ese objeto. Puede que dos espacios de grandes dimensiones nos transmitan sensaciones completamente distintas, uno puede que nos intimide y otro puede que nos haga sentir a gusto. Todo dependerá de la dimensión y la masa.

  1. La luz sobre las cosas

Por último la luminosidad es uno de los factores más importantes al crear una atmósfera. La luz reaccionará con los materiales que reflejarán ésta de distintas formas. Eligiendo los materiales adecuados que concuerden con la luz natural se podrá crear un entorno agradable.

EXTRALIMITACIONES

Hay que entender la arquitectura cómo un entorno. No podemos escapar de la arquitectura, estamos rodeados de ella al 100%, es dónde la gente se relaciona, crea vida. Se puede ver con una vista artística llegando a la conclusión de que la arquitectura es un arte útil ya que nació con una función concreta. La forma en la que se lleve a cabo la obra influirá sobre todos los individuos de una manera distinta. Finalizaremos con la conclusión de que la finalidad será crear un espacio bello que cree una atmósfera única y que todo encaje y concuerde entre si.